Central nuclear y ovejas radioactivas pastando tranquilamente.
Una vida cerca de la central.
“Eso lo que tienen que hacer es cerrarlo ya”, señala con su bastón Benito Vadillo, pastor de 56 años, que cuida de su rebaño de ovejas en un prado cercano al municipio con la ayuda de su perra ‘Zagala’, a la que llama constantemente.
Un municipio de 18 habitantes.
Seguridad
Los visitantes.
“Diariamente vivirán aquí unas 5 o 6 personas, aunque en fin de semana venimos los demás”, explica Miguel Moreno, prejubilado de una empresa de telefonía que se afana, mientras habla, en repartir abono en el jardín de la casa que construyó en la aldea en 1974. Un municipio al que le sería imposible celebrar un partido de fútbol amistoso si se jugara solo con sus habitantes censados.
El "freno" de la región.
Para Fernando García, miembro de AVACA es una “tomadura de pelo” muy peligrosa que el PSOE “utilice por tercera vez” a Garoña en su campaña electoral y considera que las malas decisiones que se toman en cuestiones de seguridad y mantenimiento forman parte “de la contaminación política” que existe a nivel local.
Celebración por la continuidad a las puertas de la central.
Santa María de Garoña, la aldea nuclear. Municipio de 18 habitantes que acoge la central nuclear más antigua del parque atómico español, se debate entre el cierre de la planta en 2013 y su posible prórroga hasta 2019. Estos son algunos de sus rincones y habitantes fotografiados por Claudio Álvarez para El País.
Reportaje gráfico de Claudio Álvarez en:
http://politica.elpais.com/politica/2011/11/19/album-01/1321659289_335179.html
Texto completo del artículo sobre la situación actual de la localidad en:
http://politica.elpais.com/politica/2011/11/19/actualidad/1321658320_274025.html
No hay comentarios:
Publicar un comentario